viernes, abril 21, 2006

"SENTIMIENTO NACIONALISTA"

Pasados estos días de recogimiento y reflexión, también conocidos como "Semana Santa", y luego del evento electoral, me integro nuevamente a la blogósfera.

Maldita suerte la mía que me tocó ser miembro de mesa; o mejor dicho, fuí Primer Suplente, y en vista que el presidente de mesa no se presentó, pasé automáticamente a tomar el puesto del mencionado miserable. Gracias a Dios me tocó ser miembro en mi colegio, lugar donde atesoro los más cálidos recuerdos de mi infancia, donde conocí a mis mejores amigos, que son como mis hermanos hasta el día de hoy, y de donde me botaron inevitablemente como a un perro sarnoso por malcriado.

Ahora, a lo que iba...

No seré Bolognesi ni Grau, ni Alfonso Ugarte, (que aunque nos duela admitir, lo más probable es que lo hayan aventado del morro de una patada, porque ningún caballo es tan idiota para tirarse por su propia voluntad) pero de todas maneras voy a tratar de gestionarme un nicho en la Cripta de los Héroes, ya que tengo el orgullo nacionalista de haberme bajado siete votos de infeliz de Humala durante el escrutinio, pasándolos a las filas de los votos nulos.

Yo me resisto a permitir que los brutos y los acomplejados de los pezuñentos Humalistas manden a mi país por el water, solo porque un cachaco huachafo les promete atrocidad y media.

Para todos aquellos peruanos que quieran conocer cómo se hace eso, pasaré a describir el procedimiento:

1. Ser peruano, Presidente de Mesa, y tener los cojones bien puestos y listos para hacer patria sin mariconadas ni remilgos.

2. Valiéndonos de nuestra condición de Presidente de Mesa, al término de las votaciones, indicaremos de forma cortés pero autoritaria al Secretario y Tercer Miembro, que seremos nosotros quienes abriremos el ánfora y las cédulas mientras ellos firman las actas "para ir ganando tiempo"

3. Aprovechando que los otros miembros se encuentran distraídos, tomaremos el lapicero oficial de la ONPE (puede ser cualquier lapicero, pero haremos esto para darle el toque irónico a la cosa) y rayaremos los votos Humalistas hasta invalidarlos por completo.

4. Mientras los miembros continúan firmando, marcaremos el candidato de nuestra preferencia en todos los votos en blanco que vayamos encontrando en el camino. Mientras no sea Humala, por supuesto, ni Alan, si Dios quiere.

5. Contaremos los votos junto con los otros miembros, a fin de pasar los números correctos a las actas (es decir, los números que nos convienen) y de evitar que los demás nos hagan exactamente la misma cagada que acabamos de hacer nosotros.

6. Con la conciencia satisfecha y el orgullo hinchado como un globo aerostático, pediremos permiso para retirarnos al baño y borrarnos del mapa, dejando a los otros miembros la tarea de quedarse hasta más tarde y entregar las actas, cédulas y material de mesa al personal de la ONPE, no sin antes, por supuesto, llevarnos los stickers tridimensionales que están cotizadísimos, ya que hoy en día, hasta el más modesto centavito nos sirve.


Así que ya saben, todos los peruanos pensantes y verdaderos nacionalistas, deberán seguir las indicaciones arriba descritas, y no tendremos nada que temer. Yo sé que todo esto no es del agrado de muchos, pero en fin, como dijo el Verdugo: "No se puede ser amigo de todo el mundo"; Lo que es yo, tengo como meta mínimo veinte votos Humalistas tirados por tierra.

Viva la democracia y Viva el Perú.


viernes, abril 07, 2006

"NADIE LE ROMPE LA MANO, PERO YO LE ROMPERÍA EL ORTO A PATADAS"

Realmente yo no quería pronunciarme en estos asuntos electorales porque, junto con el tema de las hemorroides y la religión, es una de las discusiones que nunca tendrán fin.

Pero no deja de llamarme la atención la publicidad del señor Lucho Galarreta, el famosísimo "A mí nadie me rompe la mano"

Si consideramos que eso, en su caso, es imposible porque YA están rotas, (de fábrica) o en todo caso no hay nada que romper, excepto un par de garfios que, me imagino, deben ser incomodísimos a la hora de ir a orinar, o hacer el amor sin dejar hecha hilachas a la desventurada que se le cruce en el camino. Claro; habrán quienes digan que para acostarse con una mujer, el tipo obviamente se sacará los garfios, pero el simple hecho de imaginarse al tipo, desnudo, y con un par de alas de pollo por extremidades, es algo que supera la más alucinante de las imaginaciones.

y ni qué decir de cómo hará para limpiarse luego de que la digestión salió de la recta final.

Pero muy al margen de todo esto, me parece increíblemente siniestro y huachafo valerse de alguna discapacidad para hacerse de algunos votos y así poder ir a cobrar gratis al Congreso todos los meses. Podrá ser todo lo preparado que quiera, pero al final eso de "nunca he querido que me traten como un discapacitado" y una bacinica perforada vienen a ser exactamente lo mismo, porque de lo contrario no usaría ese slogan tan ridículo.

Además, yo no confío así nomás en un tipo que nisiquiera puede hacerse el nudo de la corbata.

¡Felices elecciones a todos!