martes, noviembre 08, 2005

"LA CAGADA"

El otro día me encontraba en mi casa, ya en la puerta de salida, pues tenía que hacer una diligencia urgente por Miraflores, cuando tuve el deseo impreciso de ir al baño. Sí; ese que es ligeramente identificable, y que nos promueve la lectura.

Como estaba apurado, decidí que me convenía más hacerlo después en cualquier otro lugar, pues iba con retraso. Craso error. Al estar ya cerca a Miraflores mi urgencia era realmente alarmante, así que decidí detenerme en un grifo para pedir prestado el baño, pero procurando no toser, para evitar un desastre.

-"¿Qué tal..?" -le dije al grifero- "¿Puedes prestarme tu baño?"
-"Está con llave" -repuso sin siquiera tomarse la molestia de mirarme- "pregunte en el market"

Realizando un verdadero esfuerzo sobrehumano, me acerqué al counter y le pregunté a la señorita:

-"Señorita..disculpe..¿las llaves del baño?"
-"Ah! señor... está ocupado... ahí está mi tío, ¿sabe?, y bueno, creo que tiene para rato por que recién le ha hecho efecto el purgante y...."

No quise oír más... regresé a mi auto y solo me concentraba en encontrar un lugar con baño y en contener la opinión de mi estómago que insistía en tomar la palabra y hacerme tocar trombón al precio que sea. Al rato veo un restaurante "cinco tenedores", (donde cuanto menos te sirven, más te cobran) y me estaciono para entrar al local.

A estas alturas ya estaba pálido, con el cabello erizado, la frente perlada de sudor, y con la certeza de que moriría en tres minutos, pues los esfínteres me habían declarado la guerra, y esta vez, era vencer o morir. Entré al restaurante, y le pregunté al maitre dónde quedaba el baño, con lo último que me quedaba de aliento y los ojos abiertos como platos, como hacen los sordos para escucharnos mejor

-"Si señor, al final del corredor, a la derecha" -me indicó

Llegué al corredor, pero no al final, pues había una cola de cinco personas esperando turno. No quiero describir aquellos diez o doce minutos -que parecián siglos- en los cuales tuve que hacer acopio de todas mis fuerzas y control emocional, para no estallar en gritos desesperados, darme de cabezazos contra la pared, o simplemente desvanecerme por el esfuerzo.
Cuando llega mi turno, sale un tipo gordo de bigotes pronunciando estas aterradores paralabras:

-"No hay nada que hacer, Se atoró el water... a ver, llamen a mantenimiento..."

No pude más... encontré una puerta con un cartelito que decía "Solo Personal Autorizado", y entré, pensando que tal vez encuentraría un baño para los trabajadores del restaurante; mas no fué así, sino que era un closet donde guardaban cubiertos, manteles y servilletas de tela. Debo confesar que no me siento orgulloso, pero la premura era tal que no me importó nada ni nadie, así que extendí un mantel e hice lo que tenía que hacer, con los ojos extraviados en un éxtasis de placer. Cuando me incorporé y me estaba arreglando la ropa para recuperar un poco la ecuanimidad perdida, abrió la puerta un encargado de seguridad

-"Señor, disculpe, esto es para personal autorizado. Debo pedirle que se retire o de lo contrario tendré que dar parte al administrador" -dijo solemnemente.

-"¿Parte?" -le respondí- "Para qué vas a darle parte... ten... dale todo." -dije mientras le entregaba la encomienda envuelta en el mantel


Luego salí por la puerta principal; reconfortado...


..y sin mirar atrás.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Orgullo nacional:
cagar o morir!

Anónimo dijo...

Puta, que cague de risa...
orgullosos de ser peruanos :D

gang dijo...

a la reputamadre lagarto! cual era la especialidad de la casa? mazamorra cochina?
hubieses pedido un vasito de agua mineral para remojar la servilleta antes de limpiarte.... suaveciiiiiito...

capitan dijo...

un "cague" de risa

Man Ray dijo...

¿Agua mineral?

Qué interesante...

Anónimo dijo...

mielda te maleaste, pero era reventar fuera o cargar al muerto mismo canguro pero en el culo, ni modo pues

Anónimo dijo...

jajajajajajajajaaaaaa!!!!!

no acostumbro usar esta expresion pero creo que respecto a este post queda que ni mandada a hacer:

hiciste que me cagara de la risa... suerte para mi que tengo un baño aqui cerquita, ¡¡¡¡¡jajajaja!!!!!

oye wey, dejame felicitarte, suponiendo que esta anecdota sea verdadera y que verdaderamente te haya pasado a ti, entonces eso te convertiria en el rey de las marronadas (¿marranadas?), con una hazaña que haria palidecer de envidia al mas misio, chicha, cholo, naco o marron (como dices tu) sujeto que maneje o cobre en cualquier transporte publico de tu ciudad o la mia. jajajaaaa!

sabes que? en lo personal no me agradan demasiado ciertos temas tan escatologicos como este, pero tu lo has contado con tanta gracia y desfachatez que no puedo menos que aplaudirte y decirte que tienes bastantes aptitudes como humorista y escritor.
maestrin, no se en que trabajes o que estudies, pero tal vez deberias reconsiderar tu vocacion y valorar mejor tus dones.
(y conste que no estoy hablando de tu aptitud para "hacer cagadas" a cada rato)

Isabella dijo...

Què asco Lizard! jajajaja!, no hay nada que hacer que eres la "cagada"!

Tortuga Maldita dijo...

JA JA JA! La muerte Lizard pero la gente no quiere prestar nada...ni el baño que horror...